La historia de una mujer santafesina apropiada que busca conocer sus orígenes
En medio de la búsqueda de Loan Peña en Corrientes y la sospecha dentro de las líneas investigativas de que el pequeño haya sido víctima de una red de trata de personas, la santafesina Ivana Guidotti contó su historia personal atravesada por la apropiación.
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Ivana nació en la ciudad de Rosario, según consta en su partida de nacimiento. Se crió como única hija en el seno de un matrimonio descendiente de italianos y rusos, conformado por Juan Carlos y Delia del Valle, en la ciudad de Santa Fe, que no podían tener hijos. Su madre había perdido dos embarazos.
Cuando empezó a tomar conciencia, los interrogantes sobre algunas cuestiones de su vida crecieron y las respuestas recibidas le resultaban insuficientes.
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Ivana Guidotti es una mujer santafesina que se enteró a sus 16 años por una compañera de que "Era adoptada". Allí comenzó su lucha por conocer sus orígenes.
Maiquel Torcatt / Aire Digital
"Cada vez que me pedían en el colegio la partida de nacimiento, mis padres iban a Rosario a buscarla. Cuando consultaba a mis padres o a mis tías sobre por qué mis padres eran rubios, de ojos claros, y yo castaña, se ponían nerviosos o incómodos", recordó Ivana.
La mujer confirmó sus sospechas cuando tenía 16 años, en un episodio más que particular: "Lo estaban por operar a mi papá y le digo a una compañera 'acompañame a rezar a la capilla' y ella me respondió 'para qué, si sos adoptada'. Ahí terminé de confirmar lo que sospechaba. Tomé a mal la actitud de mi compañera y nunca más le hablé, pero la noticia no me angustió".
Ivana regresó del colegio y le preguntó a su mamá si era adoptada. La mujer se puso muy nerviosa y, sin mediar respuesta alguna, solo atinó a ofrecerle un té.
Ivana recibió la confirmación por parte de sus padres sobre su apropiación
Cuando nació su tercer hijo, Ivana, entonces con 26 años, estaba preocupada porque su primera hija había muerto de un tumor cerebral. Tenía miedo de que puede existir alguna patología genética. Citó a comer a sus padres y, llorando, les suplicó que le dijeran la verdad.
"Me dijeron 'te fuimos a buscar a Rosario (eso es una apropiación), te anotamos como hija nuestra y teníamos mucho miedo. Nos vinimos sin saber nada, la partera nos ofreció saber quién era tu madre biológica, pero nosotros no quisimos saber nada. Nos vinimos todo el viaje con mucho miedo", relató Ivana.
Ivana les consultó cómo se enteraron de su nacimiento, pero la respuesta –con evasivas– no le convenció.
"No soy la única, somos muchos los que estamos en esa situación. A los apropiadores les vendían el libreto de que somos hijos de estudiantes de medicina en Rosario, de diferentes parteras", manifestó Ivana, quien asegura que se trata de una práctica habitual.
Tras la confirmación sobre su apropiación, Ivana hizo su duelo y luego emprendió el camino de búsqueda de su identidad. En el 2010 pudo dar, en Rosario, con la partera y con el médico que intervinieron en su nacimiento. En ese entonces tenían ambos cerca de 80 años.
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En pleno centro de Rosario le escribió una carta a la partera, la mujer la leyó, se comunicó con ella y tiempo después se reunieron. Ivana le manifestó a la mujer la necesidad de conocer sus orígenes.
"Mi mamá siempre me decía que yo había sido un caso muy especial. Cuando me encuentro con la partera, ella me dijo que mi mamá biológica era muy parecida a mí y que 'fuiste un caso muy especial para el doctor Fonseca'", relató la entrevistada.
Ese mismo día, en Rosario, Ivana revisó la guía de teléfono para dar con el número del doctor Fonseca. Lo llamó y le dijo que ella estaba buscando sus orígenes. "Me dijo que no se acordaba nada, que él no tenía nada que ver. De golpe se olvidó de todo", contó Ivana.
"No tengo nada que reprocharle a mis padres del corazón, ellos me decían que solo pagaron la internación de mi mamá biológica. Mi mamá falleció y no me dijo nada más, solo que yo podía ser de un pueblo cercano a Rosario. En la familia nadie preguntaba, eran secretos muy bien guardado", explicó Ivana.
La entrevistada aclaró que en esta lucha estuvo un poco más acompañada por su padre, que por su madre (hoy fallecida). Su padre, con algún deterioro por la edad, le manifestó que es hija de una madre soltera de un pueblo cerca de Rosario.
Según el padre, el médico se contactó con la empresa donde él trabajaba, para avisarles del nacimiento de Ivana y allí viajaron a buscarla.
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En medio de su lucha por conocer a sus padres biológicos, apareció la sospecha por su hijo/s fallecidos cuyos cuerpos no vio.
Maiquel Torcatt / Aire Digital
La historia paralela que a Ivana le genera sospechas: los supuestos mellizos nacidos muertos
Ivana fue madre de su primera hija. La niña falleció a los dos años producto de un tumor cerebral. Luego, tuvo otro hijo y un tercer embarazo, que se complejizó.
Tuvo un embarazo de riesgo, con hemorragias, fue muy controlada. El médico era vecino suyo, en la ciudad de Santa Fe. Cuando llegó a los seis meses de gestación, hubo complicaciones y la internaron en una clínica privada para inducir el parto. Fue a cesárea y le dijeron que el bebé estaba fuera del útero y que había fallecido.
"Yo estaba en shock porque me dijeron que había nacido muerto. Me hicieron firmar papeles. Según el médico, era un poder para estudiar mi caso. Ni sé que decían esos papeles", explicó Ivana, quien desde hace poco más de un año se animó a hablar sobre el tema.
Cuando nació su último hijo, el médico le dijo "es igualito al bebé que perdiste". Ivana volvió a hablar con el médico en 1997, le pidió explicaciones sobre lo que había pasado y, según el profesional, ella había tenido mellizos, ambos fallecidos ya que uno de ellos tapaba al otro, por eso se veía solo uno en las ecografías.
A Ivana la historia así contada nunca le cerró. Ella no vio a su hijo o hijos fallecidos, tampoco al padre de los niños se los mostraron. Ivana, llena de dudas, dejó de frecuentar en el 2000 a su obstetra de cabecera y la historia tiene un final abierto. La entrevistada sospecha de otra posible apropiación: "Yo no sé si están vivos o no".
Ivana lucha en representación de los hijos apropiados en paralelo a la dictadura
"A todos nos vendieron la misma historia, que somos hijos de estudiantes que no podían llegar a su casa con un bebé. Sigo buscando mis orígenes, me generan curiosidad los parecidos", explicó Ivana, quien asegura que su historia representa a muchos argentinos.
"Estamos más movilizados por el caso de Loan, pero el tráfico de bebés existió siempre, no es solo Corrientes y Salta. Hay casos en Rosario y en Santa Fe", señaló.
"Muchos no se animan a hablar. Me pregunto si fuimos realmente dados o nos robaron. Mis padres del corazón sabían lo que estaban haciendo, pero tampoco los justifico. Ellos me criaron con mucho amor. Mi mamá biológica tuvo el coraje de llegar al último día del embarazo y poder decir 'No quiero abortar'."
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En el 2007, Ivana comenzó su militancia junto a dos personas: Pedro Guardamagna (Córdoba) y Cecilia Fantini (Santa Fe), a quienes luego se le sumó Guadalupe Yódice (Santa Fe). Intentaron juntar firmas para armar una ONG que los agrupe, pero no lo lograron.
"Desde 2017 en Santa Fe hay una ley de identidad biológica y en la Secretaría de Derechos Humanos de Rosario se pueden dejar plasmadas las historias. La asociación Búsquedas está comprometida con la causa", indicó Ivana.
"Me encantaría poder encontrarme con mi mamá biológica y poder cerrar este capítulo. La mayoría de los que fuimos apropiados durante el proceso militar, y antes también, no cerramos nuestra historia. Sigo buscando, sigo preguntando, son pactos de silencio".
