Un camino marcado por la lucha y la resiliencia
El 10 de julio de 2011, en un contexto donde la identidad de género aún no estaba reconocida legalmente en el país, Alejandra Selenia Victoria Ironici logró que la provincia de Santa Fe aprobara la rectificación de su Documento Nacional de Identidad y su partida de nacimiento. Esta decisión fue posible a partir de un dictamen de la Fiscalía de Estado, que determinó que el reconocimiento de la identidad autopercibida de Ironici era un derecho humano fundamental.
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Su nuevo DNI fue entregado oficialmente el 12 de marzo de 2012 en un acto encabezado por el entonces gobernador de la provincia, Antonio Bonfatti, en la Casa de Gobierno de Santa Fe. Aquel momento representó un paso fundamental en la lucha por los derechos de las personas trans en Argentina.
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La lucha de Alejandra Ironici había comenzado varios años antes. Enfrentó discriminación laboral y la negativa del Registro Civil a modificar sus datos personales. Fue entonces cuando recurrió a la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia, encabezada en aquel momento por Rosa Acosta, quien determinó que sus derechos constitucionales estaban siendo vulnerados.
Este respaldo permitió que la Dirección General de Asuntos Jurídicos del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos reconociera su derecho a la modificación de su identidad registral, aunque con la advertencia de que el acto debía ser homologado judicialmente. Finalmente, el dictamen del fiscal de estado abrió la vía administrativa que permitió el reconocimiento de su identidad y sentó un precedente para la futura Ley de Identidad de Género, sancionada en 2012.
El crimen y la muerte de Alejandra Ironici
Alejandra Ironici fue asesinada el 21 de agosto de 2022 en su domicilio. Su sobrino, al regresar a la vivienda que compartían, encontró el cuerpo de Ironici con signos de quemaduras y heridas de arma blanca en una habitación incendiada. La investigación señaló como principal sospechoso a su pareja, Héctor Barrero, quien fue detenido posteriormente.
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Condenaron a prisión perpetua al transfemicida que a Alejandra Ironici
En marzo de 2024 la Justicia de Santa Fe condenó a prisión perpetua a Héctor Barrero, el transfemicida que mató a puñaladas y luego prendió fuego a la militante trans Alejandra Ironici, en un claro crimen de odio.
Barrero fue condenado luego de un juicio oral donde confesó ser el autor del crimen, pero no se hizo cargo del abuso sexual por el cual también fue juzgado. El fallo fue en línea a lo que había solicitado en su alegato de clausura la fiscal del caso, Alejandra Del Río Ayala, que requirió la reclusión perpetua para el acusado y que se lo declare autor de abuso sexual con acceso carnal y transfemicidio agravado (por el vínculo de pareja del acusado y la víctima, y por haber sido cometido en un contexto de violencia de género).
El impacto de su legado
Alejandra Ironici no solo logró su reconocimiento personal, sino que se convirtió en una activista incansable por los derechos de la comunidad trans. Su caso fue una referencia clave para el avance de la legislación en materia de identidad de género en Argentina.
A más de una década de aquel logro, su nombre sigue siendo un símbolo de lucha y transformación en la provincia de Santa Fe y en todo el país.