La endometriosis se caracteriza por la presencia de tejido endometrial fuera del útero, lo que puede provocar dolor pélvico crónico, sangrado abundante y dificultades para concebir. Además, puede impactar significativamente en la vida sexual y emocional de quienes la padecen.
Se estima que entre el 21% y el 45% de las mujeres con endometriosis experimentan dolor durante las relaciones, lo que repercute en su autoestima y bienestar general.
Avances en investigación, diagnóstico y tratamiento
Los tratamientos con progestágenos demostraron ser eficaces para reducir la acción de los estrógenos y controlar el crecimiento anormal del tejido endometrial, responsable de la inflamación y el dolor. Al frenar este proceso, contribuyen a aliviar el dolor pélvico crónico y a mejorar la calidad de vida de las pacientes.
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Muchas mujeres llegan al diagnóstico después de buscar un embarazo sin éxito, mientras que otras presentan síntomas focalizados sin relación directa con el ciclo menstrual.
“Si bien actualmente hay opciones de tratamientos orales muy efectivos para la endometriosis, es fundamental un manejo personalizado e integral, eligiendo la terapia hormonal más adecuada según la respuesta individual de cada paciente. En el ámbito de los avances científicos, el desarrollo de estrategias innovadoras, como la edición genética, el uso de células madre y la aplicación de inteligencia artificial, están transformando el diagnóstico médico. Estas herramientas permiten identificar biomarcadores y analizar grandes volúmenes de datos, lo que impulsa métodos menos invasivos. Sin embargo, su aplicación práctica aún requiere más estudios clínicos”, concluye la Dra. Florencia Gauthier, Médica Especialista Consultor en Ginecología MN 96910.
Dentro de estas opciones, existen alternativas terapéuticas orales de primera línea respaldadas por diversos estudios científicos que evidencian sus beneficios en la reducción del dolor y su buen perfil de seguridad. Sin embargo, el manejo de la endometriosis debe ser personalizado e integral, eligiendo la terapia más adecuada según la respuesta individual de cada paciente.
En el ámbito de la investigación, el desarrollo de estrategias innovadoras, como la edición genética, el uso de células madre y la aplicación de inteligencia artificial, está transformando el diagnóstico médico. Estas herramientas permiten identificar biomarcadores y analizar grandes volúmenes de datos, impulsando métodos menos invasivos. No obstante, su aplicación práctica aún requiere más estudios clínicos.
“Si te detiene, puede ser endometriosis”
Concientizar sobre la endometriosis es clave para un diagnóstico precoz y un tratamiento oportuno. Esta enfermedad, compleja y muchas veces silenciosa, no solo afecta la vida cotidiana de millones de mujeres, sino que también puede comprometer su fertilidad y bienestar emocional.
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La endometriosis ocurre cuando células del endometrio, el tejido que recubre el útero, crecen fuera de él y se desarrollan en otros órganos.
“Es relevante que las mujeres NO normalicen el dolor en las menstruaciones y consulten a su médico o ginecólogo especialista. Un diagnóstico temprano y oportuno es clave para un manejo personalizado y a medida según las necesidades de cada paciente”, destacó el Dr. Matías Jofré, presidente de la Sociedad Argentina de Endometriosis MP: 28602 - ME: 13289.
Cómo se produce la endometriosis
La endometriosis ocurre cuando células del endometrio, el tejido que recubre el útero, crecen fuera de él y se desarrollan en otros órganos. Este tejido puede romperse y sangrar, afectando principalmente los ovarios, las trompas de Falopio y el intestino. Con el ciclo menstrual, estas lesiones responden a los cambios hormonales, generando inflamación, dolor y posibles complicaciones si no se diagnostican a tiempo.
Si bien las causas exactas de la endometriosis aún no se conocen completamente, sí se sabe que es una enfermedad estrógeno-dependiente. Su diagnóstico puede ser complejo y, en algunos casos, puede demorar entre ocho y diez años, lo que refuerza la importancia de prestar atención a los síntomas y acudir a controles médicos regulares.
Síntomas a los que hay que estar atentas
Es clave identificar señales de alerta como:
- Dolor menstrual intenso que altera la calidad de vida o impide realizar actividades cotidianas.
- Molestias al mantener relaciones sexuales.
- Sangrado abundante o irregular.
- Problemas de fertilidad sin causa aparente.
- Inflamaciones crónicas o dolor pélvico persistente.
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La endometriosis se caracteriza por la presencia de tejido endometrial fuera del útero, lo que puede provocar dolor pélvico crónico, sangrado abundante y dificultades para concebir.
En algunos casos, el dolor es tan severo que las pacientes deben planificar su vida en función de su período, lo que impacta en su vida personal, laboral y emocional. Además, la falta de empatía o desconocimiento sobre la enfermedad puede generar dificultades en el entorno laboral y social.
El diagnóstico: un desafío a superar
El diagnóstico de la endometriosis requiere una evaluación clínica detallada y estudios de imagen, como ecografías transvaginales o resonancias magnéticas, para detectar la presencia de lesiones o distorsiones en el útero y otros órganos. En algunos casos, el diagnóstico solo se confirma mediante una cirugía laparoscópica.
Muchas mujeres llegan al diagnóstico después de buscar un embarazo sin éxito, mientras que otras presentan síntomas focalizados sin relación directa con el ciclo menstrual. En casos extremos, la endometriosis puede afectar incluso órganos distantes del aparato reproductor.
Concientización en Santa Fe por el Día Mundial de la Endometriosis
En este “marzo amarillo”, en el marco del Día Internacional de la Endometriosis, que se conmemora el 14 de marzo, la asociación civil "Endo Santa Fe" busca generar conciencia sobre la importancia del diagnóstico temprano y el acceso a tratamientos adecuados.
La entidad invita a participar en las actividades que se llevarán a cabo a partir de las 17 horas en San Martín 2533, con el objetivo de brindar información, apoyo y visibilizar esta enfermedad que aún es poco comprendida.
