Los números no cierran: cada día del año, en la provincia de Santa Fe recuperan su libertad, en promedio, 9,5 personas detenidas en cárceles o dependencias policiales. Sin embargo, la cantidad media de personas que caen en prisión cada 24 horas es de 12,5.
La cuenta es simple. Si todos los días se suman tres personas más que deben ser distribuidas en las dependencias del Servicio Penitenciario provincial y en comisarías, a fin de año habrá 1.095 detenidos más de los que existían un año antes.
Si se tiene en cuenta que la futura cárcel de Recreo -que en estos momentos construye el Gobierno de Santa Fe- albergará a 900 reclusos, la provincia necesita construir una nueva prisión por año para que no siga agravándose la actual sobrepoblación carcelaria.
Entre el 25 y el 28 de marzo próximos, el Gobierno santafesino espera iniciar las obras de una nueva cárcel en Piñero, que se llamará "El Infierno", destinada a presos de alto perfil. Se espera que sea el penal que cuente con los máximos niveles de seguridad en toda Latinoamérica.
Según información suministrada por el Ministerio de Seguridad de Santa Fe, las cárceles provinciales cuentan con una capacidad instalada para alojar a 7.625 personas; pero a mediados de la semana pasada había 10.489 presos dentro del Servicio Penitenciario y otros 1.378 en comisarías.
El desbalance, entonces, llega a 4.242 detenidos. Es decir que Santa Fe sufre una sobrepoblación carcelaria superior al 55%.
En estos momentos, la distribución de detenidos en unidades penitenciarias (UP) provinciales es la siguiente: UP 1 (Coronda), 2.825 presos; UP 2 (Las Flores), 2.015); UP 3, 309; UP 4, 74; UP 5, 985; UP 6, 595; UP 10, 434; UP 11, 2.820; UP 12, 428. Estos números varían día a día.
Fuente: Ministerio de Seguridad de Santa Fe.
Según información suministrada por el Ministerio de Seguridad de Santa Fe, durante los próximos tres años -hasta el final de la gestión de Maximiliano Pullaro-, el gobierno provincial proyecta la construcción de 6.512 nuevas plazas carcelarias. Si esto se logra, será un paso crucial hacia el equilibrio que hoy no existe.
Del total de presos que se alojan en estos momentos en cárceles provinciales o dependencias policiales, 544 se encuentran detenidos por delitos federales. En los próximas días continuará el traslado de detenidos hacia la nueva cárcel federal de Coronda.
La nueva cárcel federal de Coronda está pensada para 462 presos, aunque hasta el momento solo fueron trasladados 106 a sus instalaciones. Esto implica que, aun cuando este penal federal funcione a pleno, no alcanzará a cubrir la totalidad de la demanda de plazas.
En 2015, las cárceles santafesinas alojaban a 144 presos federales por falta de infraestructura del Estado nacional. Pero esta cifra fue creciendo con el paso de los años y, en 2024, trepó a niveles récords, con un total de 643 detenidos por delitos federales en penales santafesinos.
El crecimiento en la cantidad de presos federales alojados en penales santafesinos comenzó a agravarse a partir de 2016, con 203 detenidos. Un año después, la cifra se había duplicado, y llegaba a 407. En 2018, fue el primer año en que se superó los 600 presos federales en cárceles de Santa Fe.
El permanente traslado de presos, por distintos motivos y hacia distintos lugares, implica un enorme esquema de recursos económicos, movilidad y recursos humanos para el Servicio Penitenciario.
Fuente: Ministerio de Seguridad de Santa Fe.
Solo a modo de ejemplo, en mayo de 2024 alrededor de 1.700 presos en toda la provincia debieron ser trasladados a dependencias judiciales para asistir a distintas audiencias, a centros médicos para que reciban atención, salidas transitorias o traslados definitivos,
Fuente: Ministerio de Seguridad de Santa Fe.
El paquete de leyes de Seguridad aprobado en diciembre de 2023 apunta, entre otros objetivos, a reducir la necesidad de trasladar a presos.
Por ese motivo, se avanzó en un esquema de videoconferencias para el caso de las audiencias judiciales, se buscaron alternativas para que los traslados hospitalarios sean mínimos -solo en casos que no puedan ser atendidos en el sistema de salud interna de los penales) y establecieron límites al movimiento de los denominados "presos de alto perfil".
Fuente: Ministerio de Seguridad de Santa Fe.
De esta manera, en diciembre del año pasado hubo menos de 1.000 traslado de presos en toda la provincia, lo que implicó una reducción de alrededor del 70% en siete meses en el número de detenidos que debieron ser movilizados.
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