El conductor, que provenía de Clusellas, no presentó el carnet de manipulación de alimentos requerido ni el certificado de la Assal, que además se encontraba vencido. Al abrir la carga, se constató que el sistema de refrigeración del camión estaba averiado, lo que había provocado que tanto la manteca (2.500 kilos) como el queso (1.500 kilos) se encontraran en mal estado.
El personal policial, ante la situación, decidió secuestrar toda la mercadería, que fue posteriormente destruida en el relleno sanitario. Según las autoridades, el destino de la mercadería era la localidad de Recreo, donde se presume que sería distribuida en comercios locales.
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La importancia de la detección a tiempo en este tipo de casos
El operativo fue llevado a cabo por la Policía de Seguridad Vial de la región 2 de Rafaela, con el objetivo de resguardar la salud pública y evitar que los productos en mal estado llegaran al mercado. Las investigaciones continúan para determinar si los comercios de Recreo estaban al tanto de las condiciones en las que se transportaba la mercadería.