El tribunal dio a conocer los fundamentos de la condena a César Pérez por el femicidio de Marcela Maydana, cometido en Recreo en abril de 2021.
César Pérez y Marcela Maydana fueron pareja durante varios años.
Maiquel Torcatt / Aire Digital
Los jueces que condenaron a prisión perpetua al contador César Pérez por el femicidio de Marcela Maydana dieron a conocer los fundamentos de la sentencia. El tribunal, conformado por Cecilia Labanca, Rosana Carrara y José Luis García Troiano, repasó la prueba producida en el debate que condujo a la condena por unanimidad del acusado.
El juicio a Pérez se realizó en abril en los tribunales santafesinos; la acusación fue sostenida por los fiscales de homicidios Carlos Lacuadra y Estanislao Giavedoni, y el abogado querellante, Raúl Sanchez Lecumberri.
Pérez fue asistido por los abogados defensores Federico Scarinci y Ezequiel Gramois, quienes intentaron poner en duda la investigación y desvincular a Pérez con el crimen de Maydana. Marcela Maydana fue asesinada de un disparo en la cabeza entre la noche del sábado 3 y la madrugada del domingo 4 de abril de 2021. Su cuerpo fue encontrado el miércoles 7 de abril en un zanjón cuneta.
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Una de las preguntas que respondieron los jueces es si Marcela estuvo en la vivienda de César Pérez el 3 de abril de 2021, cuando fue vista por última vez. Para esto, el tribunal repasó varios testimonios de las personas que tuvieron contacto con Marcela ese día: el remisero que la llevaba y la buscaba del trabajo y su hijo, que la había ido a buscar esa noche a Monte Vera.
También analizaron lo manifestado por el propio Pérez sobre sus actividades de ese día, y de lo declarado por la dueña de la rotisería y la empleada donde el sospechosos había encargado la cena: "Se puede inferir que Perez esperaba a alguien para cenar y que esa persona se había demorado", valoraron, y recordaron que la versión brindad por Perez, que había ido en el entretiempo del partido de River, "no se sostiene porque a esa hora el partido ya había terminado. Si Marcela se retiró de su casa pasadas las 22:30, es posible que haya sido a ella a quien esperaba para cenar", sostienen los fundamentos a los que tuvo acceso AIRE.
La presencia de Marcela en la casa de Perez se corrobora porque, a pesar de que la relación ya había finalizado desde hacía bastante tiempo, se encontraron prendas de mujer y restos biológicos: cabellos y rastros de sangre.
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Otra de las preguntas que respondió el tribunal es sobre el lugar donde se produjo el disparo y quien fue el autor; el tribunal repasó los testimonios de los peritos que realizaron la tarea de recolección de huellas y rastros en el inmueble, como también de aquellos que realizaron las muestras biológicas y los cotejos de dichas muestras.
Para los jueces, en este punto es relevante lo manifestado por un agente policial que, mientras se buscaba a Marcela Maydana, advirtió un fuerte olor a lavandina en la vivienda de Perez: “Recordemos que el 5 de abril las tareas desarrolladas tenían como objetivo el hallazgo de una persona desaparecida, pero con vida”, valoraron los jueces.
Para vincular a Perez como autor del disparo fatal, el tribunal refirió como primer indicio las lesiones que varios testigos observaron en los brazos de Perez, mientras todavía se buscaba a Marcela.
La escasa presencia de sangre en el dormitorio fue explicada por el perito que reconstruyó el ataque: al ser efectuado el disparo a corta distancia, la herida presentaba las características de un golpe de mina de Hoffman: “se efectúa un efecto de bob pattern: el gas rebota y se lleva consigo la sangre. cuanta es imposible determinarlo”, explicó el experto.
El tribunal también repasó todas las medidas que se llevaron adelante tras la denuncia por el pedido de paradero de Marcela, incluso cuando la familia había volcado las sospechas sobre Perez: los investigadores siguieron varias líneas de investigación y entrevistaron a varias personas vinculadas con Maydana: “Lo plasmado hasta aquí permite descartar que la investigación se haya desenvuelto en una especie de pseudo cacería contra el acusado Perez, adquiriendo más bien una direccionalidad lógica hacia su persona en virtud de los indicios recolectados”, valoró el tribunal.
Finalmente, en cuanto al agravante de la violencia de género, los jueces recordaron que "se ha volcado cuantiosa prueba en este debate en relación al hostigamiento y la violencia que sufría la victima -y todo su grupo familiar- por parte del acusado".
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