La investigación por el ataque a los cadetes del Liceo Militar de Santa Fe ya fue concluida. En la acusación se anticipa un pedido de pena de prisión perpetua para Martín Kunz.
La traffic fue interceptada por personal del Comando que logró la detención de Kunz
Aire Digital
La fiscal de la Unidad de Homicidios Ana Laura Gioria dio por terminada la investigación por el ataque a los cadetes del Liceo Militar de Santa Fe, ocurrido en agosto de 2022. En su escrito acusatorio, al que tuvo acceso AIRE, anticipa que pedirá la prisión perpetua de Martín Kunz, quien se encuentra detenido desde el día del ataque.
La familia de la víctima fatal del ataque perpetrado por Kunz, Rubén Isidro “Bigote” Walesberg, se presentó como querellante en la causa con representación de los abogados Daniel Recamán y Néstor Oroño, quienes presentarán la acusación en los próximos días.
Fuentes del caso confirmaron a AIRE que la audiencia preliminar se realizará el 24 de abril ante el juez penal Nicolás Falkenberg. En tanto, Kunz es asistido por la defensora pública Virginia Balanda.
El escrito presentado por la Fiscalía, que cuenta con el aval de la familia de Walesberg, repasa los hechos ocurridos pasada las 13 del 19 de agosto de 2022, cuando la traffic que trasladaba a un grupo de liceístas y que conducida la víctima fatal, se detuvo en inmediaciones de la panadería La Perla, como era habitual. El local está en un centro comercial de Colastiné Norte, sobre la ruta provincial nro. 1.
Esta situación fue aprovechada por Kunz que arremetió primero contra el chofer y luego contra los cadetes que se habían quedado en el vehículo. Walesberg falleció a causa del ataque, y cuatro adolescentes resultaron heridos. Luego, obligó a uno de los menores a conducir la traffic por un trayecto de 5 kilómetros hasta que fue interceptado por la policía.
Kunz fue imputado como autor de homicidio criminis causae, tentativa de homicidio calificado criminis causae reiterada (cuatro hechos) y privación ilegal de la libertad personal en concurso real, calificación que se mantiene en la acusación fiscal. Desde entonces se encuentra detenido en prisión preventiva, a la espera de la resolución del proceso que será a través de un juicio oral y público.
En cuanto a la posible condena a prisión perpetua, que es la que implica la calificación de criminis causa seleccionada por los acusadores, la Fiscalía precisó que "se pudo constatar que el acusado planificó de antemano la forma en la que iba a llevar a cabo los hechos, en primer lugar acabando con la vida del chofer de la camioneta como parte del plan delictivo que le permitiría luego tomar de rehenes y privar de la libertad a los cadetes que se encontraban en el interior de la misma, y en segundo lugar, la intención final revelada por él mismo a las víctimas de darles muerte a ellos también, lo que se vio frustrado por el rápido accionar policial".
El 19 de agosto de 2022, cerca de las 13:10, una camioneta Mercedes Benz perteneciente a la empresa de transporte “Tío Mario”, trasladaba cadetes del Liceo Militar General Belgrano, de la ciudad de Santa Fe, con destino a la ciudad de San Javier.
La camioneta era conducida por Rubén Isidro Walesberg, conocido como "Bigote", quien detuvo la marcha en la panadería “La perla de Colastiné” ubicada en el kilómetro 1 de la Ruta Provincial n°1; cuando el chofer descendió para hacer una compra fue abordado por un hombre encapuchado que lo atacó con un cuchillo y le ocasionó una herida mortal en el lado derecho del cuello.
Luego, el agresor atacó a tres de los ocupantes del vehículo que se encontraban en el lugar: una menor de 17 años, y dos muchachos de 14 y 13 años. Todos sufieron heridas en la zona del cuello y del rostro.
La secuencia criminal continuó cuando Kunz obligó a uno de los cadetes a conducir por la ruta 1 en dirección al norte y privó de la libertad a los siete estudiantes que no pudieron escapar de la traffic. En el trayecto, que se extendió hasta el kilómetro 7 tras cruzar calle Bomsembiante, Kunz les dijo que los iba a matar y hasta les aclaró que le agradecieran al padre de uno de los jóvenes que fue víctima del ataque.
El personal del Comando Radioeléctrico logró interceptar el vehículo en el kilómetro 6,5 de la Ruta n°1, donde hicieron descender a todos los ocupantes, secuestraron un arma blanca y aprehendieron a Kunz.
Además de las declaraciones de las víctimas y testigos del hecho, forman parte de la acusación dos informes psíquicos realizados a Kunz. El primero fue el que realizó una psicóloga de la Fiscalía que sostuvo en que el atacante, a lo largo de la entrevista, tuvo una actividad “manipuladora”; su pensamiento fue rígido y de curso normal; y mantiene ideas reivindicatorias y delirantes, por lo que se requirió una valoración psiquiátrica.
En tanto, el examen realizado por una médica psiquiatra del Hospital “Mira y López”, dictaminó que Kunz se encontraba “vigil, lúcido, orientado en tiempo y espacio, euproséxico, indiferencia afectiva respecto a lo sucedido, con conciencia de situación, discurso ordenado y coherente, no despliega ideación delirante, niega alteraciones sensoperceptivas, juicio conservado”.
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