En el corazón de la fe católica, cada 18 de septiembre, se conmemora la vida y milagros de San José de Cupertino, un santo venerado por sus curaciones milagrosas, su extraordinaria humildad y paciencia, y su especial conexión con los estudiantes.
San José de Cupertino es conocido por su alegría al ayudar a los estudiantes.
Famoso por su habilidad de volar, tanto física como espiritualmente, según relatos de quienes vivieron en su época, San José de Cupertino es una figura inspiradora que trasciende el tiempo y el espacio.
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Quién fue San José de Cupertino
Nacido el 17 de junio de 1603 en el pequeño pueblo italiano de Cupertino, en Lecce, José se crio en un entorno de pobreza y desafíos. A menudo menospreciado y considerado inútil debido a su dificultad para concentrarse en tareas cotidianas, su vida tomó un giro impresionante.
Contra todo pronóstico, José de Cupertino emergió de la adversidad, aprendiendo oficios y desarrollando una destreza notable. Su humildad, bondad, espíritu de penitencia y amor por la oración, lo llevaron a ganarse el respeto y la admiración de sus contemporáneos.
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En 1625, José fue unánimemente aceptado como religioso franciscano. A pesar de reconocer sus limitaciones en la predicación y la enseñanza, encontró su camino en la oración y la penitencia, dedicándose a la salvación de almas.
Su vida estuvo marcada por fenómenos extraordinarios: la capacidad de exorcizar demonios, leer los corazones, estar simultáneamente en dos lugares, sanar y profetizar.
Por qué San José de Cupertino es el Santo de los estudiantes
La conexión de San José de Cupertino con los estudiantes se remonta a un momento crucial de su vida. Durante el examen final para ser ordenado en la Orden Franciscana, se libró de la prueba gracias a las brillantes respuestas de sus compañeros.
Este acontecimiento lo convirtió en un símbolo de esperanza y apoyo para estudiantes, especialmente aquellos que enfrentan dificultades en sus estudios.
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San José de Cupertino es conocido por su alegría al ayudar a los estudiantes, y en su santuario en Osimo, continúan acumulándose testimonios de su intercesión milagrosa.
Oración a San José de Cupertino para pedirle por los exámenes
San José de Cupertino, modelo de paciencia y humildad, ruega por mí.
San José de Cupertino,
tesoro de gracia, ruega por mí.
San José de Cupertino,
hoguera de amor de Dios, ruega por mí.
Gloriosísimo San José de Cupertino,
benefactor de los estudiantes,
protector de los examinandos,
no desdeñéis las súplicas que os dirijo
implorando vuestro auxilio en los exámenes de mis estudios.
Alcanzadme del Señor que,
como verdadera fuente de luz y sabiduría,
disipe las dos clases de tinieblas de mi entendimiento,
el pecado y la ignorancia,
instruyendo mi lengua
y difundiendo en mis labios la gracia de su bendición.
Dadme agudeza para entender,
capacidad para retener,
método y facultad para aprender,
sutileza para interpretar,
y en el momento del examen,
gracia y abundancia para hablar,
acierto al empezar,
dirección al progresar y perfección al acabar,
si así conviene a la mayor gloria de Dios
y provecho de mi alma.
San José de Cupertino, espejo de fe y esperanza,
ruega por mí y pide para que sea ayudado en lo que deseo conseguir.
San José de Cupertino,
fuente de caridad, ruega por mí.
Amén.
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