En Amsterdam 1928, fue la primera campeona de los 100 metros llanos en unos Juegos. Tres años después sufrió un accidente de aviación y, su estado era tan grave, que la dieron por muerta y la llevaron ¡a una funeraria! Pero sobrevivió milagrosamente y, después de una larga y durísima rehabilitación, regresó para alzarse con el oro en la posta de los 4x100 metros en Berlín 1936.