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La advertencia de Putin y las repercusiones en la OTAN
La aprobación del uso de misiles ATACMS llega en un momento crítico. El presidente ruso, Vladímir Putin, ha advertido que cualquier uso de estas armas podría considerarse como una "participación directa" de la OTAN en la guerra de Ucrania, lo que eleva las tensiones entre Moscú y Occidente.
La decisión de Washington se enmarca en un contexto limitado, enfocado en la defensa de las fuerzas ucranianas en la región rusa de Kursk, donde Ucrania ha llevado a cabo incursiones recientes.
Serhiy Kuzan, presidente del Centro de Seguridad y Cooperación de Ucrania, celebró esta decisión como "muy importante" para su país. “No es algo que cambie el curso de la guerra, pero creo que hará que nuestras fuerzas sean más igualitarias”, comentó.
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Biden autorizó a Ucrania a usar misiles de largo alcance contra Rusia
Con esta autorización, se abre la puerta para que Reino Unido y Francia también otorguen el permiso a Ucrania para utilizar sus misiles de largo alcance Storm Shadow en territorio ruso. Sin embargo, ambos países aún no se han pronunciado al respecto. Esta medida surge en respuesta a la decisión de Rusia de permitir que soldados norcoreanos luchen junto a sus tropas en Ucrania, lo que intensifica el conflicto en la región.
Mientras tanto, la política exterior de Estados Unidos podría enfrentar cambios significativos si Donald Trump regresara a la presidencia. Trump ha sido un crítico constante del apoyo militar a Ucrania, considerándolo un "desperdicio de recursos" y ha insinuado que pondría fin al conflicto de manera rápida, aunque sin detallar cómo lo lograría. Esta postura genera incertidumbre sobre el futuro de la cooperación militar entre Estados Unidos y Ucrania.
Desde el inicio de la invasión rusa, Estados Unidos se ha consolidado como el principal proveedor de armamento para Ucrania. Según datos del Instituto de Economía Mundial de Kiel, Washington entregó o comprometió un total de 55.500 millones de dólares en armas y equipos hasta junio de 2024.