Las muertes de las niñas en circunstancias similares
Manuela falleció el 7 de octubre debido a un paro cardiorrespiratorio, y ocho días después, el 15 de octubre, su hermana Antonia murió con síntomas similares. Según Graciano Ronnau, comandante del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Igrejinha, cuando atendieron el caso de Antonia, la niña presentaba “paro cardiorrespiratorio y orinaba”, igual que su hermana gemela.
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El padre de las niñas, Michel Pereira, que no es considerado sospechoso, afirmó que ambas estaban sanas y que, tras la muerte de Manuela, Antonia había sido llevada al médico por precaución.
Investigación en curso: la madre fue detenida
La similitud en las muertes y el hecho de que Gisele estuviera sola con sus hijas en ambos momentos despertó las sospechas de la policía. El jefe de la investigación, Cleber Lima, aseguró que la mujer está acusada de doble homicidio y que se están esperando los resultados de los análisis toxicológicos.
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Antonia y Manuela, dos niñas de seis años, murieron con ocho días de diferencia.
Lima indicó que las niñas podrían haber sufrido “envenenamiento o intoxicación por una gran dosis de medicamento o veneno”. Además, se investiga la muerte de tres gatos de la familia y un incidente previo en el que la madre habría colocado medicamentos en la comida de su esposo.
Una madre con antecedentes de inestabilidad psicológica
La investigación ha revelado que Gisele padecía problemas psicológicos graves desde la muerte de su hijo mayor, ocurrida hace dos años en un hecho relacionado con el narcotráfico. Familiares declararon que la mujer había sufrido un brote psicótico 40 días antes y que, desde entonces, su comportamiento con las gemelas había cambiado.
Los investigadores señalaron que Gisele fue internada en una clínica psiquiátrica y que, al salir, su estado mental seguía siendo preocupante. El jefe de policía destacó que “problemas psicológicos pudieron haberla llevado a cometer estos crímenes”. Según testimonios, la madre mostraba celos de la relación cercana entre el padre y las niñas.
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Antonia y Manuela murieron en Brasil.
Sospechas de envenenamiento por medicamentos o veneno
Los médicos que atendieron a las niñas en el hospital informaron a la policía sobre la sospecha de intoxicación. Según un comunicado, ambas niñas padecían hemorragias inusuales para su edad y condición. La cantidad de secreción sanguinolenta aspirada llamó la atención de los médicos, quienes descartaron que se tratara de una infección y sugirieron la posible ingesta de veneno o un medicamento.
Michel Pereira, el padre de las gemelas, expresó su desconcierto sobre las muertes de sus hijas: “Lo único que les di fue amor. Hasta el último momento no creía que fuera nada”. Actualmente, las autoridades siguen a la espera de los informes periciales que determinarán las causas exactas de los fallecimientos.
