Día 1 sin cepo al dólar. Finalmente debutó el nuevo esquema cambiario que se anunció el viernes pasado. En esta etapa, que el ministro Luis Caputo denominó cómo la “ fase 3 del programa económico ”, se destacan dos medidas importantes:
Se eliminó la tablita cambiaria (crawling peg), que venía aplicando el Banco Central de microdevaluaciones mensuales y se levantó casi por completo las restricciones para comprar dólares (en especial, para las personas físicas).
En el primer día de los cambios, la cotización en el mercado oficial pegó un salto del 11%, esto significó una devaluación diaria del 10% del peso y encendió las alarmas sobre el impacto que podría tener en los precios y su traslado inmediato a la inflación que, desde febrero quebró la tendencia a la baja y se alejó del objetivo trazado de perforar el 2% mensual.
Desde el Gobierno descartan un fogonazo inicial y prefieren hablar de un “chispazo” en los precios, que se van a adaptar a esta nueva realidad del dólar y confían que luego del impacto inicial, con el correr de los meses se apuntale con fuerza la baja de la inflación.
Si bien es muy difícil determinar cuánto impactará este nuevo esquema en la inflación de los próximos meses, para la mayoría de los analistas, es un hecho que el índice de precios se verá afectado en el corto plazo. Sin embargo, dependerá del nivel en el que se acomode el tipo de cambio y sus fluctuaciones.
LEER MÁS ► La inflación no se pinchó en marzo: llegó al 3,7% mensual, la más alta en siete meses
El traslado de la suba del tipo de cambio a los precios, que técnicamente se conoce como pass through, en la Argentina es estructuralmente más alto que en otros países.
También hay que recordar que una parte importante de la tecnología que consumimos, se importa y se paga en dólares. En ese caso, el traslado a los precios del aumento del dólar golpea directamente, por ejemplo, en los valores de las computadoras, celulares e insumos informáticos. Además, otros costos relacionados con la venta de esos productos, como el packaging y la logística, también presionan al alza.
Otro de los rubros posiblemente afectados en el corto plazo será el de viajes y los consumos en el exterior.
Quienes hayan realizado estos gastos deberán convalidar ahora un tipo de cambio más alto, al momento de pagar el resumen mensual en pesos.
Pero, podrían elegir pagar esos consumos con dólares propios y evitar los recargos impositivos que continúan vigentes, abaratando los costos.
Lo mismo sucede con muchos servicios de streaming como Netflix, Spotify, Amazon Prime y YouTube Premium, estos productos están atados a la evolución del dólar oficial.
Dólar sin cepo: unos suben y otros bajan
En contraste, mientras el dólar oficial subía en los bancos; las cotizaciones financieras y en la plaza informal, se registraron caídas:
- El dólar Blue bajó un -6,55% y se ubicó en $1.285.
- El dólar MEP cayó un -8% a $1.235
- Y el dólar Contado con Liquidación (CCL) retrocedió -6% a $1.250.
Nuevo esquema cambiario sin cepo: ¿cómo funciona?
El nuevo régimen de libre flotación entre bandas móviles que aplicó desde esta semana el Banco Central, le fija un piso de $ 1.000 y un techo de $1.400 a la evolución del dólar en el mercado oficial.
El sistema funciona de la siguiente manera:
Si la cotización del dólar en el mercado mayorista sube y llega al techo de la banda, ahí es donde, el Banco Central interviene de manera directa: vendiendo dólares de las reservas y retirando pesos de circulación.
En cambio, si el dólar baja y llega al piso, el Banco Central, está obligado a realizar la operación contraria: compra dólares para acumular reservas y lanza pesos al mercado que ahora los demanda.
En el medio de la banda, hay libre flotación y el precio lo determina la oferta y demanda sin intervención oficial.
A su vez, el límite superior (techo) aumentará al 1% mensual, a la par que el límite inferior (piso) disminuirá al mismo ritmo, ampliando progresivamente el rango de flotación libre hasta que eventualmente las bandas pierdan relevancia.
Como referencia, el límite superior alcanzará los $1.516 hacia fines de 2025 y el límite inferior se reducirá a $923 en diciembre próximo.