Se trata de un innovador examen de neurometría que permite clasificar hasta 5 tipos de inteligencias y transformar la comprensión de las capacidades cognitivas y emocionales de las personas.
El argentino que trajo al país un novedoso test que detecta talentos y habilidades a partir de las ondas cerebrales.
Desde hace algunas décadas, muchas disciplinas relacionadas con la gestión de los recursos humanos se están enfocando en encontrar soluciones a un problema creciente en las empresas: el burnout, la falta de motivación y el desgano que sienten las personas en sus ámbitos laborales.
“Nosotros queremos que al cerebro de las personas les genere mayor placer y menor desgaste de energía las tareas que realizan en el día a día”, señala Pablo Mazzitelli, fundador de TQ Experience, una tecnología que, según él mismo, “resuelve de manera definitiva el problema del talento”.
Por la buena recepción que está teniendo ésta tecnología revolucionaria, la firma planea durante este 2025, expandirse a Uruguay, Estados Unidos y México.
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TQ no es un examen de coeficiente intelectual sino un estudio neurofisiológico que combina neurociencia, psicología y tecnología avanzada para luego proporcionar información invaluable sobre las habilidades naturales de cada persona.
El motivo por el que las personas deben trabajar en conocer sus habilidades es que, “descubrir lo que nos apasiona es lo que le da sentido a nuestra vida”, destaca Mazzitelli. “Estamos en una película que va en automático. Se siguen legados o patrones sociales y muchas personas no son felices. Pero porque no saben lo que quieren. Hay que encontrar un sentido. Si hay una herramienta que nos ayuda a saber en qué somos buenos, tenemos que aprovecharla y potenciarla”, agrega.
La tecnología que introdujo el argentino fue creada en Silicon Valley y es utilizada en más de 25 países.
A partir del uso de una vincha colocada en la cabeza del usuario pueden medirse las ondas cerebrales y luego, el sistema, valiéndose de la IA evalúa el estímulo/respuesta de aproximadamente 45 preguntas sobre matemáticas, emocionalidad, hobbies, hábitos, rutinas, vínculos, etc. “La tecnología arroja un algoritmo avanzado y lo compara con millones de estudios científicos. Su efectividad es del 92%”, destaca Mazzitelli.
La diferencia con las tradicionales orientaciones vocacionales es que en éstas, se necesitan 10 sesiones o más para obtener un análisis que, además, será subjetivo. En este caso, a través de la ciencia de datos, la máquina da un resultado lo más ajustado posible.
El examen, que tiene su génesis en Rusia de la mano de la firma Verbatoria -a partir de la historia de un padre que buscaba una solución para comprender el talento de su hijo diagnosticado con trastorno del espectro autista-, ha sido desarrollado en el Reino Unido y Suiza en colaboración con expertos internacionales.
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El test de TQ tiene múltiples aplicaciones, desde orientar a estudiantes en la elección de carreras adecuadas, hasta detectar niveles de liderazgo en los usuarios o ayudar a empresas y equipos deportivos a seleccionar a las personas indicadas para distintos roles.
Además, se pueden utilizar los resultados para elegir actividades en la primera infancia o para adaptar métodos de enseñanza, mejorando el aprendizaje y la memorización en los estudiantes. Esto genera ahorro de tiempo y dinero, y evita mayores frustraciones cuando, muchas veces, lo elegido por instinto no resulta en un beneficio. “Queremos que sepan que está bien perseguir sus sueños, que se puede buscar y encontrar lo que les gusta, su motivación e inspiración. "Para ellos creamos espacios con ejercicios de desarrollo personal, pensar en la rueda de la vida, soñar con cómo se ven de acá a 5 años”, destacan.
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Al nivel de las organizaciones esta tecnología puede medir tipos de líderes de acuerdo a la empatía o la autoestima y ofrece respuesta en esas instancias de incertidumbre laboral o cuestionamientos que todas las personas tienen, al menos una vez, a lo largo de su trayecto laboral. ¿Para qué soy bueno? ¿Realmente me gusta mi trabajo? ¿Puedo trabajar en equipo? ¿Cómo soy formando grupos, delegando y supervisando? “Las personas pueden ser genios para un área determinada porque no siempre se es inteligente en todos los aspectos. Nuestra tecnología mide 5 tipos de inteligencia que nos permite determinar donde el cerebro genera más disfrute y consume menos energía. Nosotros les damos a las personas el top 3 de profesiones modernas y del futuro en las que les recomendamos desarrollarse”.
Las preguntas que realiza el test son sencillas porque el valor no está en la respuesta correcta sino en la cantidad de energía que usa el cerebro para resolverla. De esta forma, quiénes realizan el test deberán leer frases al revés, resolver una suma simple, describir imágenes o realizar un muñeco de plastilina en pocos segundos. En la resolución de esas actividades el cerebro usa cierta cantidad de neuronas y una parte del cerebro más que otra.
“Lo que determinamos es si a tu cerebro le cuesta mucho o poco resolverlo, si te aburre, si te emociona, si te entristece. Qué sucede en tu cerebro mientras realizas la actividad o respondes las preguntas. No medimos lo que responden las personas sino cómo reaccionó el cerebro en el mientras tanto”, destacan desde la firma.
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