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Criptomonedas: un mundo financiero accesible aunque muy poco conocido

"Del criptoescándalo nos escandalizó la falta de conocimiento que hay", dice Jimena Vallone, de Bitcoin Argentina, ONG dedicada la formación en criptomonedas.

Criptomonedas, blockchain, bitcoin, token, criptobro, memecoin, rug pull son palabras que irrumpieron de un día para el otro en el vocabulario cotidiano. Un mundo nuevo que era de circulación restringida, y ahora se pone al alcance de todos. La criptoestafa que difundió el presidente Javier Milei tuvo sus repercusiones en las conversaciones de todos los días.

Pero ¿todo el mundo sabe de qué se trata? “Del criptoescándalo nos escandalizó la falta de conocimiento que hay. Tuvimos que multiplicar esfuerzos”, explica Jimena Vallone, directora ejecutiva de la ONG Bitcoin Argentina, creada en 2013.

No sólo tuvieron que capacitar a la comunidad, que es el primer objetivo de la organización, sino también “a los tomadores de decisiones".

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Algunas preguntas básicas permiten acercarse a un mundo asociado en el imaginario colectivo al dinero fácil, a hombres que saben cómo hacerlo, y también a las estafas.

—¿De qué hablamos cuando hablamos de Bitcoin?

—Las criptomonedas y particularmente bitcoin es un dinero digital que tiene unas propiedades que la hacen diferente al dinero que conocemos y genera que sean transacciones mucho más fáciles y con otro tipo de de respaldo.

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Jimena Vallone está enfocada en la formación a la comunidad en Bitcoin,

Jimena Vallone está enfocada en la formación a la comunidad en Bitcoin, "la madre de las criptomonedas".

—¿Cuál es ese respaldo?

—Está en el código, que es esta blockchain que les da mucha más seguridad, transparencia porque nosotros ya sabemos cuántas se van a emitir. Entonces es una moneda que es deflacionaria, no inflacionaria y segura en términos tecnológicos.

—¿Qué es un blockchain?

—Es esta cadena de bloques, que es como si fuese un libro contable enorme en donde todo lo que va sucediendo va quedando registrado y no se puede modificar de ninguna manera. Se inicia con un código, que son un montón de cuentas que están escritas que dicen que nunca se van a emitir más de 21 millones. Entonces, ya sabemos cada cuánto se va emitiendo y ya sabemos qué es lo que hay. Cada uno que adquiere ese pedacito va a tener ese pedacito siempre, no lo vas a poder modificar.

—Es una moneda que no depende de ningún Banco Central, es internacional, ¿Cómo se regula?

—Hay un código que dice cuánto se va a emitir y de qué manera cada uno puede acceder a tener estas cripto y es autorregulada por el mercado, en cuanto a oferta y demanda. El valor que se le va dando, generalmente, uno se fija a cuánto está en relación con el dólar, pero tiene un valor en sí mismo. Es moneda internacional, no tiene fronteras y no tiene intermediarios.

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—¿Y de qué depende el valor?

—El valor va a depender de la oferta y la demanda, pero no hay una unidad, como el peso, donde hay alguien que determina su valor. Acá hay una tecnología de fondo, que es esta cadena donde queda todo registrado con un código abierto que no se puede manipular, es como si fuese el oro, pero de manera digital.

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Según una encuesta, el 15% de las personas que operan con bitcoins a nivel mundial son mujeres.

Según una encuesta, el 15% de las personas que operan con bitcoins a nivel mundial son mujeres.

—¿Cuál es la diferencia entre bitcoin y criptomonedas?

—Una cosa es bitcoin, que es la madre de todas las criptomonedas, con propiedades distintas. Después surgen otras criptomonedas, sobre otras blockchain, con otras propiedades que quizás no llegan a tener las mismas bondades que tiene bitcoin y además de eso existen los token.

—¿Qué son los token?

—Son representaciones que se registran en esta blockchain y que pueden ser tanto granos como vacas, lo que vos quieras registrar. Todo lo podés tokenizar, que es transformarlo en un registro en esta blockchain, se puede mostrar como una foto de lo que está sucediendo y uno puede hacer transacciones más ágiles que si tuviese que estar llevando X cantidad de vacas de un lugar a otro.

—¿Y qué se necesita para invertir en criptomonedas?

—Más que hablar de inversión, yo digo que es un sistema financiero, no es el tradicional, sino que es descentralizado. No tenés intermediarios, no tenés bancos. Es para todos, es una tecnología recontra inclusiva porque no te pide datos, no te pide edad, no te pide nada.

O sea, no necesitas una historia crediticia o para abrirte una cuenta en el banco te empiezan a pedir si estás en relación de dependencia, un montón de datos. Acá no te piden nada.

—¿Y hace falta un mínimo de dinero?

—Vos te podés abrir una wallet y te compras lo que quieras. Y vos podés comprar una fracción de Bitcoin, que son los Atochis. Podés comprar la fracción más mínima que sea, pero más que invertir es una forma de transaccionar.

—¿Por qué preferís no hablar de inversión?

—Porque es volátil y cuando va aumentando, porque la gente la va demandando más, uno puede llegar a tener una diferencia. Sí, hay gente que sabe hacer esas cosas y puede llegar a verlo como una inversión. Pero siempre son inversiones más a largo plazo, porque la volatilidad no es para cualquiera.

—Es decir que no se trata de dinero fácil, como a veces se supone…

—No es que si yo tengo una diferencia y la voy a necesitar pasado o mañana, me conviene ponerla ahí, porque quizás la volatilidad hace que uno pierda muy rápido. Justo estos días estuvo bajando un poquito y cuesta un poco más. Aún así, es para cualquiera.

—¿Y cómo se hace para entrar en el mundo cripto?

—La ONG Bitcoin Argentina ofrece cursos para el que no sabe nada. Yo puedo tener mi plata, me voy de viaje y la voy a seguir teniendo en el celular. No necesito estar llevándome billetes ni pidiendo autorización para hacer remesas. Tiene un montón de bondades que permiten una agilidad, que al ciudadano le da mucha más facilidad.

—¿No atentan contra las lógicas más tradicionales para generar este dinero, la cultura del trabajo, del ahorro?

—Siempre va a haber fuerza de trabajo y nadie va a tener un bitcoin si no trabaja. En el mundo cripto todos trabajan y quizás traducen ese ingreso en cripto o en bitcoin y eso lo puede usar en el día a día. No es que uno vive de las bitcoin.

—Pero existe ese imaginario…

—Pasa que hay muchas estafas o un montón de token que se generan haciéndole creer a la gente de que va a tener unas diferencias enormes por los aumentos de precio y la gente se tienta, somos todos medio angurrientos en algunas cosas.

—Entonces, hay un mito sobre los traders…

—Ahí es donde parece que hay gente que vive de la cripto y se muestran con relojes de oro, que se compran un millón de autos y demás, como pasó en estos días que condenaron a (Leonardo) Cositorto con el caso Zoe. La verdad es que nadie se va a hacer millonario por esto. Uno tiene que trabajar y después puede tener suerte si invierte y justo hubo una diferencia de valor. Pero la fuerza de trabajo va a ser siempre fuerza de trabajo y estas son diferentes formas de transaccionar dinero.

—¿Y cuáles son las estrategias básicas para estar alertas ante una estafa?

—No todo lo que brilla es oro y no todo lo que brilla es bitcoin. Hay que estar siempre alerta. Si te están ofreciendo un 8% mensual de rendimiento, alerta. Si te están hablando de que está respaldado en una mina de oro en no sé qué, alerta. No está respaldado en nada tangible. Alerta si te están diciendo que tenés que ingresar con X cantidad de plata, nadie te va a pedir nada. Si te piden usar tus datos, alerta, o sea. Nosotros damos capacitaciones todos los jueves de manera gratuita online y también presenciales.

—¿En qué consisten esas capacitaciones?

—Tenemos cursos para principiantes, tenemos consultorías tanto gratuitas como rentadas para aquellos que quizás las necesitan para su trabajo y también tenemos una clínica de orientación legal para aquellas personas que creen ser víctimas de estafa o lo fueron. Tenemos abogados que los pueden acompañar y esas charlas terminan siendo instancias educativas porque seguramente a esas personas les presentaron un mega proyecto que parecía superalentador.

—¿Por ejemplo?

—Cobraste el aguinaldo y te dicen, "Meterlo todo acá que te va a rendir X cantidad." Y si uno no hace el análisis, lo pongas en crypto, en algún proyecto que sea medio estafa o lo pongas en otro activo, si uno no estudia qué hay de fondo, generalmente son proyectos que no van a ir para adelante.

—¿Y cómo se hace para saber qué hay por detrás?

—Nosotros lo que siempre decimos es que antes de invertir, hay que estudiar, consultar con diferentes organizaciones. La nuestra es una organización sin fines de lucro, no vendemos nada, no pedimos nada a cambio. Entonces, desde ese punto quizás es un espacio superneutral donde las personas pueden aprender de manera fácil y sencilla.

—¿Podemos llegar a un a un horizonte donde las criptomonedas se utilicen para la vida cotidiana?

—Creo que la adopción es cada vez más alta. La verdad es que todos manejamos dinero digital hoy. La gran diferencia que tiene el cripto es que no desaparece porque no hay un banco de por medio. Falta un montón de educación financiera a toda la comunidad en general.

Mujeres en el mundo cripto

La participación de mujeres en el mundo cripto también es minoritaria, como sucede en el sistema financiero tradicional. Según eToro, el 15% de las personas que operan con bitcoins a nivel mundial son mujeres. Para el caso de ether, la criptomoneda de la red Ethereum, la cifra baja a un 12%.

Daiana Gómez Banegas, fundadora de Mujeres en Bitcoin, escribió que el 67% de las personas excluidas precisamente son mujeres”.

“En Argentina, en promedio, sólo el 22% de las cuentas se encuentran en manos femeninas. Sin embargo, si la tendencia de la industria imita a la de la economía en general, para el 2042 las mujeres duplicaremos nuestra participación y la representatividad sería del 40% del total patrimonial en criptoactivos”, se entusiasmó.

Vallone subraya que el mundo cripto es inclusivo, y genera oportunidades para las mujeres.

—En general, el sistema financiero es considerado una cosa de hombres ¿hay una mayor posibilidad para las mujeres?

—El ecosistema cripto y bitcoin en general es sumamente inclusivo. Entonces, no le va a importar si son varones o mujeres y eso le da una oportunidad a las mujeres de poder tener herramientas financieras mucho más accesibles y no tener que estar pidiéndole a tu hermano, a tu tío o alguien que te explique un poquito más. Es un poco más fácil desde ese lado.

—¿Hay mujeres que lideran estos mercados?

—Hay muchas mujeres liderando equipos en cuanto a los desarrollos. No son las más, digamos, pero el desarrollo va más adelante y la verdad que en cripto y bitcoin todos somos anónimos o seudónimos atrás de la red y eso a las mujeres le da una oportunidad y las empodera para tener muchísima más autonomía también en el uso de sus finanzas y no tener que estar quizás pidiendo permiso como era en otras épocas.

—¿Es necesario un nivel educativo determinado?

—Es para cualquier persona, porque todos manejamos dinero independientemente de la formación que tengamos.

—¿Por qué brindan capacitaciones?

—Nosotros como comunidad necesitamos que más gente entienda de cripto, porque si no van a aparecer un montón de estafas. Cuando uno habla de dinero necesita tener confianza. Entonces, si uno pierde la confianza en ciertos proyectos se va a retirar de este tipo de sistemas y no queremos que esto suceda. No nos importa nada de los temas políticos. Queremos educar a la comunidad para que tengan criterio y que puedan elegir bien y que nadie les venda una cosa por otra.

Los cursos gratuitos pueden consultarse en https://bitcoinargentina.org/