Lo que parecía ser un arranque tranquilo de temporada, con refuerzos solicitados y tiempo para ensamblar el plantel, se convirtió en una situación límite por la falta de resultados. Las propias declaraciones del Kily aumentaron la incertidumbre tras la última derrota ante Huracán: "No me pongo plazos para nada. Si veo que mis jugadores no me responden, me voy. El día que vea que mi equipo juega horrible, seré el primero en irme", sentenció el técnico.
Aunque en el campo se observa un equipo con actitud y entrega, la falta de funcionamiento preocupa. Los hinchas comienzan a impacientarse y el entorno del club exige respuestas. El rendimiento no alcanza y la presión crece a medida que se acerca el debut en la Copa Sudamericana, previsto para abril.
Un arranque de año complicado y una "final" anticipada para Unión
Nadie en Unión esperaba este difícil inicio de 2025. La dirigencia cumplió con los refuerzos que el entrenador pidió para fortalecer un plantel que afrontará desafíos internacionales. Sin embargo, en lugar de tener un comienzo tranquilo para ajustar el equipo, los malos resultados aceleraron los tiempos y el margen de error se redujo al mínimo.
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El encuentro ante Gimnasia se convirtió en una "final" adelantada. Aunque aún falta más de un mes para el inicio de la Sudamericana, la presión ya se instaló en Santa Fe. Los hinchas, con la paciencia agotada, miran con atención lo que pueda suceder este fin de semana.
Sin embargo, más allá del resultado, lo cierto es que no hay ningún técnico que asome en Santa Fe como posible reemplazante, y mucho menos que tenga la trayectoria que tuvo el Kily durante su carrera, al menos como futbolista. La dirigencia le reconoce lo hecho en el último año y medio al entrenador y, por ello, sigue dándole la confianza para revertir la situación.
Los números del Kily González en Unión
Los resultados son el principal argumento que pone al Kily González en la cuerda floja. Desde su llegada al club en julio de 2023, el técnico ha dirigido 68 partidos: 20 victorias, 24 empates y 23 derrotas.
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¿El Kily González se juega su futuro en Unión contra Gimnasia?
Esto le otorga una eficacia del 41,6%, un porcentaje que casi iguala al del Vasco Azconzábal, quien fue despedido en septiembre de 2021 tras conseguir un 40,83% de efectividad (12 triunfos, 13 empates y 15 derrotas en 40 partidos).
En comparación, el uruguayo Gustavo Munúa tuvo una eficacia aún menor, con un 38,5% tras dirigir 71 partidos (22 victorias, 19 empates y 30 derrotas). Por su parte, el más "exitoso" de los últimos técnicos del club fue Sebastián Méndez, quien dirigió solamente 11 encuentros, con una eficacia del 48,4% (4 victorias, 4 empates y 3 derrotas).
