Hernán García, uno de los acusados por el homicidio de una bebé en 2020 en Avellaneda, fue condenado a 28 años de prisión.
Condenaron a 28 años de prisión a uno de los acusados del de la bebé de 5 meses en Avellanea.
La justicia condenó a Hernán García a 28 años de prisión por el asesinato de Lola Jazmín Montero, la beba de cinco meses que murió en octubre de 2020 al recibir un disparo en la cabeza en un complejo habitacional de Dock Sud, en Avellaneda.
El Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N.º 1 de Avellaneda-Lanús sentenció a Hernán García por el delito de “homicidio agravado por el uso de arma de fuego” y también por tenencia ilegal de arma de fuego. Por su parte, la decisión judicial absolvió a Iván Amarilla, el segundo imputado en el caso, quien estaba junto a García en el momento de los disparos
El medio local Diario Conurbano informó que la fiscal Natalia Millione, quien había encabezado la acusación y pedido 32 años para el acusado, anunció que apelará la absolución de Amarilla ante el Tribunal de Casación Bonaerense, buscando justicia completa para la familia de la víctima.
Según los testigos, ambos hombres dispararon con la intención de atacar a Mariano Dacosta, un joven de 28 años.
El 22 de octubre de 2021, Carolina Orellana, madre de Lola, salió de su hogar en el complejo habitacional Nicolás Avellaneda, en Dock Sud, con su hija en brazos de camino a la panadería del barrio. Mientras esperaba en la fila, se desató un tiroteo en el pasillo cuando Hernán García e Iván Amarilla ingresaron armados en busca de Mariano Dacosta, quien estaba en la verdulería frente al comercio.
En medio del tiroteo, una de las balas rebotó en una pared e impactó en la cabeza de Lola, quien estaba en brazos de su madre. Los vecinos alertaron a Carolina de que su hija estaba sangrando, y corrieron a avisar a José Montero, el padre de la beba, que estaba en su casa durmiendo.
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"Fue un momento desesperante. Me vinieron a avisar y estaba trabada la cerradura de la puerta, no sé ni cómo la llegaron a abrir. Cuando salí me encontré a mi señora desesperada, con la nena en brazo", relató Montero.
Actuando rápidamente, Montero tomó a su hija y un vecino los llevó hasta un destacamento policial cercano, desde donde fueron trasladados al Hospital Fiorito. Allí, a pesar de realizarle RCP, Lola falleció horas después debido a la gravedad de la herida.
José Montero, el padre de la pequeña, no oculta su desconsuelo. En una entrevista con TN, expresó su frustración al recordar que la bala estaba destinada a Dacosta, quien después del crimen se acercó a la familia para disculparse con poca empatía, diciendo: "Como bardearon estos giles".
Montero recordó que conocía a Dacosta desde chico e intentó ayudarlo muchas veces, alentándolo a encaminar su vida. "Yo trataba de llevarlo para un buen lado. Qué ironía que yo estaba intentando provocarle cosas buenas y a mí me provocó lo peor que me pudo pasar en la vida", reflexionó.
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