"Miss Mundo no solo es un certamen de belleza, es una competencia donde se premia la responsabilidad social", explicó Yoana sobre su experiencia en la edición 2014, realizada en Londres. Para ella, la competencia significó mucho más que desfilar en pasarela; fue una oportunidad para demostrar su compromiso con proyectos sociales.
"El lema de Miss Mundo es ‘Beauty with a Purpose’ (Belleza con Propósito), y esa filosofía se refleja en la participación de las concursantes, quienes no solo tienen que ser bellas, sino también tener una misión social", destacó.
Y agregó: “La corona es anecdótica. Se aprende y se gana mucho para la vida. Siempre lo digo y ese es el mejor mensaje”.
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El cambio hacia la inclusión en los certámenes de belleza
Un aspecto clave de la entrevista fue el cambio que experimenta la industria de los certámenes de belleza hacia la inclusión. "Antes se exigía que fueras mujer de nacimiento y no tuvieras hijos, pero hoy los certámenes aceptan participantes trans y madres", comentó Yoana, destacando cómo la apertura hacia nuevas realidades refleja los avances sociales de los últimos años.
En cuanto a su propia experiencia, Yoana recordó cómo a los 33 años tuvo la oportunidad de volver a participar en Miss Universo Argentina, representando a Santa Fe, tras el levantamiento del límite de edad para las participantes. "Hoy hay un cambio claro. Las puertas están abiertas para más mujeres, independientemente de su edad, género o situación familiar", sostuvo.
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La 73 edición del ‘Miss Universo’ se realizará este sábado 16 de noviembre en el Arena CDMX de la Ciudad de México.
Si bien Yoana recordó su paso por el certamen como una experiencia increíble, también compartió los desafíos y el desgaste que implican. "No es solo caminar en la pasarela. Son días de concentración intensiva, pruebas de talento, deporte, entrevistas con el jurado. Hay un gran esfuerzo físico, emocional y psicológico", confesó. Para ella, estos certámenes exigen mucho más que belleza física; también requieren inteligencia, talento y fortaleza mental.
El costo invisible de participar en los certámenes
Un tema poco discutido, pero esencial, es el costo real de participar en los certámenes de belleza. Yoana destacó que los gastos de preparación, vestuario y entrenamientos suelen ser asumidos por las concursantes. "Muchos piensan que las organizaciones financian todo, pero en realidad, los costos como los entrenadores y el vestuario, corren por cuenta de la concursante", explicó.
También señaló que, si bien algunos certámenes como el de Miss Universe tienen el apoyo de los países sede, el esfuerzo económico es significativo. "Los mejores entrenadores son venezolanos y los costos de contratarlos en dólares son muy altos. Además, los recursos disponibles varían enormemente dependiendo del país de origen", detalló.
La periodista y abogada competirá el próximo 25 de mayo en la Ciudad de Buenos Aires (Foto: Instagram @yoanadon).
La periodista y abogada competirá el próximo 25 de mayo en la Ciudad de Buenos Aires (Foto: Instagram @yoanadon).
Yoana también reflexionó sobre los prejuicios que aún persisten sobre los certámenes de belleza. "Mucha gente piensa que solo se valora la apariencia, pero no es así. En Miss Mundo, por ejemplo, también se premia el compromiso social y las capacidades intelectuales de las participantes", subrayó.
Además, reveló que para ser parte de este mundo no basta con tener una buena imagen, sino con una gran resiliencia. "El certamen es un trabajo de tiempo completo. Las redes sociales ayudan a darse a conocer, pero antes de eso hay años de preparación, sacrificios y mucho esfuerzo personal", aclaró.
Un proyecto social
Otro aspecto destacado de la entrevista fue el trabajo social realizado por las participantes, algo que muchas veces no se ve en los medios. Yoana mencionó el trabajo que realizó con niños en Escobar, donde apoyaron proyectos de fútbol, inglés y piano. "Miss Mundo es una plataforma que permite involucrarse en causas sociales. Para mí, la belleza está en la capacidad de inspirar y generar cambios positivos", afirmó.
Yoana cerró la conversación con una reflexión poderosa: "Lo importante no es lo que se ve por fuera, sino lo que uno tiene por dentro. Los certámenes de belleza hoy buscan mujeres integrales, con capacidad de influir y generar un cambio en la sociedad", concluyó. Su mensaje es claro: los certámenes de belleza ya no son solo una pasarela de estética, sino un escenario donde la inclusión, el talento y la resiliencia son más importantes que nunca.
